Yo no soy tonto
Y desde luego ellos tampoco. Me refiero, claro, al Media Markt.
No será en este blog donde precisamente vayamos a hacer publicidad gratuita de los grandes monstruos del sector como éste, pero ante todo hay que ser justos y reconocer cuando se hacen las cosas bien.
Después de ganar la batalla a la competencia con una publicidad tan eficiente como agresiva y una experiencia de compra bien orquestada, uno de sus mayores defectos era la gestión de sus devoluciones.
Hace un par de días fui a devolver el último juguetito tecnológico que compré. Lo hice al mediodía, a sabiendas de las tediosas colas de espera que se forman en las horas punta.
Mi sorpresa fue ver que habían preparado una “sala de espera” con un par de grandes pantallas con vídeos musicales, butacas tipo cine y el sorprendente detalle de poner una máquina de cafés gratis.
Por cierto:
- muchos no se percataron de la invitación gratuita de cafés
- los que lo hicimos dudamos si había que poner uno de los vasos de la máquina de agua de al lado
Inusabilidades aparte, eso sí es innovar en servicio al cliente!